Los labios requieren un extra de hidratación para mantenerlos saludables y protegidos. Son una parte muy delicada y sensible de la piel que carece de glándulas sebáceas, lo que significa que no pueden producir su propia humedad natural.
Los labios NO producen su propia humedad natural y por ello es fundamental cuidar e hidratar los labios de forma constante.
Además, al estar siempre expuestos son especialmente vulnerables a la sequedad y al daño ambiental.
La hidratación regular de los labios ayuda a mantener la piel de los labios suave, flexible y protegida. También puede ayudar a prevenir la aparición de labios secos, agrietados y dolorosos.
Labios Secos, Agrietados o Secos
Comúnmente se dice: "tengo los labios secos" para mencionar algún problema en los labios pero tenemos que diferenciar entre labios secos, agrietados y rotos.
Aunque son condiciones que pueden ocurrir cuando los labios pierden humedad, se vuelven más vulnerables a las influencias ambientales y tienen algunas similitudes, existen algunas diferencias notables entre ellas:
Labios secos
Los labios secos son un problema común y que todo el mundo hemos sufrido en alguna ocasión, ocurre cuando los labios pierden su humedad natural y los sentimos ásperos y tensos, y a veces pueden pelarse.
Pueden ser causados por el clima seco, el exceso de sol, la exposición al viento y al aire acondicionado, la falta de hidratación o el uso de productos de cuidado de labios inadecuados.
Labios agrietados
Los labios agrietados es un problema o circunstancia más grave que los labios secos (nunca confundir labios secos con labios agrietados). Los labios agrietados son aquellos que tienen fisuras: las cuales provocan dolor y malestar.
Pueden ser causados por los mismos factores que los labios secos, pero también pueden ser el resultado de una infección por hongos, virus o bacterias.
Labios rotos
Los labios rotos son la forma más grave de sequedad en los labios. En este caso, la piel de los labios se ha roto y puede sangrar o formar costras.
Pueden ser causados por una lesión, como un golpe o una quemadura, pero también pueden ser el resultado de una exposición prolongada a factores irritantes como la saliva, el clima frío y seco, el viento y los productos químicos.
En general, la mejor manera de prevenir los labios secos, agrietados y rotos es hidratar regularmente los labios con un bálsamo labial suave y hacerlo de forma preventiva, NO tenemos que esperar a que nuestros labios pierdan la hidratación:
Si tienes labios muy secos, agrietados o rotos, debes hablar con un dermatólogo o médico para obtener recomendaciones adicionales sobre cómo tratar y prevenir estas condiciones.
Además de hidratar regularmente los labios hay otros hábitos o consejos que pueden ayudarte a prevenir la sequedad labial.
Remedios caseros
Aunque no siempre es posible el primer consejo es evitar la exposición excesiva a los factores ambientales que puedan causar sequedad en los labios: altas temperaturas, bajas temperaturas, radiación solar, etc...
Evidentemente no podemos quedarnos todo el día en casa para proteger y mantener la hidratación de nuestros labios, por lo que te dejamos unos consejos y remedios caseros para prevenir y tratar los labios:
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Hidratación regular: Es importante hidratar los labios regularmente para prevenir la sequedad. Bebe suficiente agua y usa un bálsamo labial hidratante varias veces al día.
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Exfoliación suave: La exfoliación suave puede ayudar a eliminar las células muertas y mantener los labios suaves. Puedes usar una mezcla de azúcar y aceite de coco para exfoliar los labios una vez por semana.
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Protección solar: Los rayos UV pueden dañar los labios y provocar sequedad. Usa un protector labial con SPF para proteger tus labios cuando estés al aire libre.
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Evita chuparte los labios: Chupar los labios puede empeorar la sequedad. En su lugar, usa un bálsamo labial hidratante para mantener los labios suaves e hidratados.
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Evita el humo del tabaco: El humo del tabaco puede irritar los labios y empeorar la sequedad. No fumes y trata de evitar sitios donde se fume, sobre todo si ya notas algún problema de hidratación en los labios.
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Evita productos químicos irritantes: Algunos productos de cuidado de la piel pueden ser irritantes para los labios. Evita productos que contengan fragancias, mentol y otros ingredientes irritantes.
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Aceites naturales: Los aceites naturales como el aceite de coco, el aceite de jojoba, el aceite de almendras o aceite de oliva pueden ser hidratantes para los labios. Aplica un poco de aceite sobre los labios antes de dormir para mantenerlos hidratados durante la noche.
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Miel: La miel es un humectante natural que puede ayudar a hidratar los labios. Aplica un poco de miel sobre los labios y déjalo durante 10-15 minutos antes de enjuagar.
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Aloe vera: El aloe vera puro es hidratante y puede ayudar a aliviar los labios secos y agrietados. Aplica un poco de aloe vera en los labios y déjalo durante 10-15 minutos antes de enjuagar.
A modo resumen, hidratar los labios y protegerlos de los agentes externos es la clave para mantenerlos sanos y suaves.
RECUERDA:
Si la hidratar no es suficiente, el problema persiste y tienes los labios rotos contacta con un dermatólogo o médico para obtener recomendaciones adicionales.